viernes, septiembre 11, 2009

Filtrando “la verdad” para hacernos sabios y ricos.


Estamos fraguando una nueva filosofía “de la relatividad”, mediante la cual sostenemos que “nada es verdad, ni mentira, sino que todo es según el color del cristal con que se mira”. Bueno, por el refrán, parece que no es tan nueva. Me da igual, si va a resultar práctica.

Según esta filosofía, todo tiene su “porcentaje de acierto y error”. Nos hemos ido convenciendo poco a poco, apoyándonos en evidencias y hechos. Y nos hemos ido dando cuenta de que esta forma de pensar puede ser muy útil si, de alguna forma, encontráramos la manera de filtrar los aciertos y depurar los fallos. Se trata de una metodología muy común en procesos físico-químicos, industriales, en biología (selección natural); pero no tan común como fórmula de razonamiento para mejorar en veracidad, autenticidad y certeza de nuestras afirmaciones, aseveraciones, sentencias, teorías o postulados. Tal vez, porque nunca hemos considerado serio de este principio tan absurdo y aparentemente contradictorio, que dice “todo el mundo está equivocado, incluso yo, al decir esto”. ¿Por qué no es contradictoria esta afirmación? Porque, como en todo, siempre hay un porcentaje de razón. Nada es absoluto, todo es relativo. Pues en la realidad no existe el cero absoluto, ni el infinito, ni lo blanco, ni lo negro… Pero en la teoría si, como concepto.

Imagina que aplicamos esta metodología a la Filosofía y conseguimos filtrar los aciertos de Aristóteles, Platón, Descartes, Kepler, Galileo, Newton… y eliminamos todos los errores que cometieron. Nos haríamos bastante sabios –modestamente hablando-. Sólo hay una dificultad, y es que los filósofos suelen ser bastante teóricos, que es justo donde no se aplica nuestro principio. Si un San Agustín dice que Dios existe, no puedes llevarle la contraria, porque Dios podría ser un concepto teórico que el ha definido, un modelo, un Ente, que como el cero absoluto de temperaturas, no existirá en la realidad, pero si como aproximaciones-muy-próximas, y, por supuesto, también en la teoría.

Bueno, pero si no lo utilizamos en Filosofía puede que nos sea útil como herramienta de trabajo en la vida diaria, para nuestra búsqueda del saber y del conocimiento entre tanta lluvia de información que nos cae de la red. En esa categorización, información, saber y conocimiento es importante la catalogación, la formalización y la objetivización. Pero es más fácil y necesario el filtrado.

Ya es demasiado habitual y rutinario fabricar presentaciones maravillosas para convencer o vender algo, apoyándose en evidencias o trivialidades, algunas muy llamativas e impactantes y con altos índices de autenticidad, que pueden tener (o no, a veces) relación con las conclusiones que se pretenden patrocinar y cuyo porcentaje en veracidad puede que ya no sea tan alto. El truco consiste en encontrar esos porcentajes. En conocerlos, al menos.

Aquí llegamos a lo que yo quería llegar. Eduardo García me ha mandado un correo; el primero, de todos los que me llegan de propaganda, al que he prestado atención. Me ha parecido que lo que cuenta posee un alto índice de veracidad, a la vez que de enseñanza práctica y útil, para, los que no sabemos mucho de economía, hacernos ricos. (Lo copio y lo pego aquí):


“INVERTIR es un concepto muy antiguo; pero no siempre bien conocido.

Nuestro INGRESO mensual proviene del sueldo del trabajo como empleado.

El destino de ese dinero es:
Financiar los GASTOS (luz, agua, gas, comida, colegios, bencina, etc.)
Amortizar PASIVOS (crédito de consumo, hipotecario, tarjetas bancarias y casas comerciales, etc.).

Si el sueldo nos alcanza para pagar los gastos y pasivos decimos que estamos bien; inclusive nos damos algunos gustos en viajes, diversión, etc.

¿Y qué pasa si perdemos nuestro trabajo de empleado?
¿Cómo financiamos nuestros gastos y pasivos?
Rápidamente buscamos otro empleo, esperando que algún empresario nos acepte en su empresa.

¿Cuándo será el MOMENTO oportuno de comenzar a INVERTIR?
¿Cuando tenga ahorrado un capital importante?
¿Y si eso nunca ocurre?

¿Tenemos claro QUE es INVERTIR?
¿Lo puede realizar la clase media y pobre?

Falta entender, con mayor profundidad, el concepto que hay detrás de la palabra INVERTIR. Por esto mismo, la mayoría de la gente piensa que es algo a lo cual NO puede acceder.

Invertir es tomar parte de nuestro ingreso mensual, ya sean $ 1.000, $ 10.000 o $ 30.000; y destinarlo a un fin distinto de pagar cuentas. No es tan importante el monto; lo importante es la actitud. Se puede comenzar con Inversiones de montos muy pequeños.

¿Pero, para QUE INVERTIR?

Muchos confunden INVERTIR con AHORRAR.

Juntar todos los meses unos $ 10.000 y no Gastarlos; irá generando un monto que llamamos ahorro. Cuando ya hay un monto interesante se gasta en financiar unas vacaciones, comprarse un auto, comprarse un LCD , etc. Si bien esto es bueno, NO es INVERTIR, es AHORRAR para luego destinarlo a un GASTO.

Uno debe INVERTIR en ACTIVOS.

Un ACTIVO es "algo" que te PONE dinero en tu bolsillo.

Un PASIVO es “algo” que te SACA dinero de tu bolsillo

Si bien desde el punto de vista de un Banco tu auto figura como un activo, no te PONE dinero en tu bolsillo. De hecho, te SACA dinero de tu bolsillo (costo de la compra, la bencina, seguros, patente, etc). Si lo trabajas como taxi, pasaría a ser un Activo; ya que te pondría dinero en tu bolsillo.

Todos estos conceptos los puedes profundizar leyendo los libros de Robert Kiyosaki (Padre Rico, Padre Pobre y El Cuadrante del Flujo del Dinero).

El objetivo final de INVERTIR es para obtener un INGRESO PASIVO (ingreso no generado por nuestro trabajo diario de empleado de una empresa).

Este “otro” Ingreso lo podemos destinar a financiar nuestros gastos o parte de ellos.

Con tu trabajo de empleado generas tu INGRESO ACTIVO (tu sueldo) y con la rentabilidad de tus inversiones vas generando tu INGRESO PASIVO. Este es el PLAN que todos deberíamos tener.

Existen muchas alternativas de Inversión: Depósitos a plazo, Fondos Mutuos, Forex, CFD, Propiedades, Negocios, etc; algunos son más rentables que otros

Gracias a la Globalización de Internet que ha acercado estos negocios al común de la gente.

Hay que comenzar a perderle el miedo a la palabra Inversión“ (http://www.forexonline.cl/)



Lo que viene a continuación, mejor, ni mirarlo, porque te propone una serie de operaciones de INVERSIÓN especulativas, que no se parecen en nada a lo que nos ha enseñado que es una INVERSION. Pero, lo que nos ha enseñado hasta aquí, vale.

Quizá montemos esta estrategia para nuestros Blog de ahora en adelante. Vamos a coger sólo lo que consideremos que tenga un alto índice de veracidad. Así nos haremos Sabios y Ricos, y nuestra sociedad ganará en Conocimiento y Prosperidad. (Que por cierto -dice la Wiki-, esta distinción entre sabiduría y conocimiento (knowledge) no existe en inglés. Parece que la sabiduría un atributo propio de las personas, mientras que el conocimiento puede asociarse más a la Sociedad).